Iniciamos este año con el mejor de los ánimos para construir, para levantar, para crear el mundo donde queremos vivir, para unir esfuerzos y conocimientos en razón de generar vínculos virtuosos para de verdad volvernos seres, sociedades y ciencia integral, como la historia lo demanda; hace tiempo las disciplinas médicas se dividieron para formar especialidades para el manejo más enfocado de los padecimientos según su tipo; y hoy en día hay tendencia a sumar áreas, no solo como tratamientos multidisciplinarios sino como nuevas especialidades, al hacerse evidente que muchas veces lo que pasa en un órgano o sistema afecta otro, en una relación de causa efecto bilateral comprometido que debe atenderse por médicos con mayor amplitud de acción dentro de esta gran complejidad, como la Endoperiodontología, que conjuga dos áreas que son la Endodoncia que atiende todo lo relativo al tejido pulpar y la Periodoncia cuya acción se enfoca a los tejidos que le dan protección y sostén a los dientes, que al amalgamarse en una nueva especialidad proveen tratamientos integrales. Por ello, es que este número de Odontología actual, centra parte de sus articulos en esta área así como en terapéuticas bidisciplinarias que quizá un día, se unan para dar paso a nuevas especialidades paradójicamente más integrales.
Abrimos el número con Dens evaginatus, manejo multidisciplinario endo-orto, un caso clínico que presenta la Universidad Autónoma de Nuevo León, que arroja la importancia del manejo bidisciplinario, porque el tratamiento en conjunto contribuyó a obtener un resultado óptimo porque los movimientos ortodónticos requieren espacios y el dens evaginatus, pudo afectar el tratamiento.
Ya dentro de la Endoperiodontología tenemos dos artículos, el primero es de la unidad Torreón de la Universidad Autónoma de Coahuila, un caso clínico de un Tratamiento de una lesión endoperiodontal tipo I, aunque se trata de una lesión endoperidontal, se consideró como una lesión endodóntica primaria por lo que el tratamiento de conductos fue el procedimiento acertado
El segundo es Quiste residual por lesión endoperiodontal, que nos trae la Universidad Juárez Autónoma de Tabasco, que reporta un caso clínico en el que se evaluaron los resultados de la regeneración ósea en nu paciente con fracaso endodóntico y lesión periapical a causa de un quiste residual.
En otros temas tenemos Epidemiología de dientes permanentes cariados, perdidos y obturados en niños de Tecpan de Galeana, Guerrero, cuyos resultados arrojan que el índice CPOD fue alto, con base en las codificaciones establecidas por la OMS.
La Facultad de Odontología de la Universidad Michoacana de San Nicolás de Hidalgo, nos presenta Control de inflamación gingival y placa bacteriana mediante el uso de un enjuague bucal con ácido hipocloroso en un paciente con aparatología ortodóntica, a quien se le administró un enjuague a base de ácido hipocloroso y sales de fosfatos, que resultó benéfico como terapia complementaria para la disminución de placa bacteriana y gingivitis.
El obturador quirúrgico es una prótesis maxilofacial que evita la comunicación entre el defecto maxilar y la cavidad nasal y permite la masticación, la fonación y la deglución que mejora la calidad de vida, como se lee en Maxilectomía por leiomiosarcoma: obturador quirúrgico de la Universidad Autónoma de Baja California.
La medicina herbolaria es una práctica ancestral que se ha utilizado por muchos años para curar diversas enfermedades entre ellas las enfermedades orales, de esto habla el artículo que la Universidad Autónoma de Nuevo León nos hace llegar titulado, Sustancias naturales aplicadas a la odontología. Para finalizar tenemos Un enfoque restaurativo para compensar las recesiones gingivales con el uso de resinas compuestas, una opción para solucionar el clásico problema estético del margen gingival. Sin más ¡bienvenidos a 2022!