La investigación para la salud está bajo muchas regulaciones y directrices, por ello es obligatorio conocer a fondo el Reglamento de la ley general de salud en materia de investigación para la salud, que es un documento por demás revelador. Cito párrafos esenciales que se desarrollan en pleno en todo el documento: Título primero, capítulo I, Art. 3º.- La investigación para la salud comprende el desarrollo de acciones que contribuyan: I. Al conocimiento de los procesos biológicos y psicológicos en los seres humanos; II. Al conocimiento de los vínculos entre las causas de enfermedad, la práctica médica y la estructura social; III. A la prevención y control de los problemas de salud; IV. Al conocimiento y evaluación de los efectos nocivos del ambiente en la salud; V. Al estudio de las técnicas y métodos que se recomienden o empleen para la prestación de servicios de salud, y VI. A la producción de insumos para la salud. Título segundo, capítulo único, artículo 14. Deberá ser realizada por profesionales de la salud (Art. 114) con conocimiento y experiencia para cuidar la integridad del ser humano, bajo la responsabilidad de una institución de atención a la salud que actúe bajo la supervisión de las autoridades sanitarias competentes y que cuente con los recursos humanos y materiales necesarios, que garanticen el bienestar del sujeto de investigación. Título sexto, capítulo único. Art. 113.- La conducción de la investigación estará a cargo de un investigador principal, quien deberá ser un profesional de la salud y tener la formación académica y experiencia adecuada para la dirección del trabajo a realizar. Art. 118.- El investigador principal seleccionará al personal técnico y de apoyo con la experiencia necesaria para asegurar su competencia en la realización de las actividades que se les asignen y, en su caso, cuidará que reciban adiestramiento y capacitación para realizar correctamente sus tareas de acuerdo al nivel de supervisión que estará disponible durante la conducción del estudio (sic). Como se ve son la base de todas las investigaciones, e incluso la atención clínica como parte de la formación que también se traduce en acervo académico a través de su publicación, por lo que es obligatorio conocer y cumplir. En esta ocasión daremos solo un breve recorrido por el contenido de este numero. Osteoartrosis en la articulación temporomandibular detectada por medio de tomografía cone beam, del Instituto Bioprogresivo de Ortodoncia, plantel sur. Es indispensable solicitar una tomografía, para observar el estado de las estructuras óseas involucradas y detectar las características de la afectación. Injerto gingival libre como tratamiento de aumento de reborde residual en zona estética, de la Universidad Autónoma de Coahuila, unidad Torreón. Este procedimiento es un buen tratamiento para casos dentro de la clasificación de defectos de Seibert, clase III. Beneficios de la disyunción maxilar sobre la respiración bucal, del Instituto de Ortodoncia Bioprogresiva, norte. Es el tratamiento de primera opción para aumentar los espacios aéreos nasales en beneficio de la respiración nasal. Revisión de técnicas fisioterapéuticas para el tratamiento del dolor de la articulación temporomandibular, del Instituto Bioprogresivo de Ortodoncia, plantel sur. Son técnicas de rehabilitación que el paciente puede realizar en casa para tener alivio más rápido. Leucoplasia grado III causada por la irritación de terceros molares superiores erupcionados y vestibularizados, de la FES Iztacala. Para solucionar esta lesión es necesario retirar el estímulo que la ocasiona. Entornos virtuales del aprendizaje, estado del arte, de la FES Iztacala, UNAM. El aprendizaje mediante este modelo, es más dinámico y en menor tiempo. Prevalencia de fluorosis en los escolares de la alcaldía Iztapalapa, FES-Z,UNAM. El Índice comunitario de fluorosis indica que en esta población todavía no es un problema de salud pública. Formatos requeridos en la recepción y evaluación de un artículo científico, de un grupo de médicos investigadores adscritos al Hopsital «Dr. Darío Fernández Fierro» (ISSSTE) y del Hospital para el Niño y la Niña (IMIEM). Nos vemos en mayo