A solo pocas semanas de que termine el 2025 y ya rondan en la mente de muchos, los nuevos propósitos para el 2026.
Pero, si de pronto es tanta la actividad decembrina que ni siquiera los has pensado, a continuación te sugerimos algunos. Checa:
1. Salud bucal y hábitos propios
- Mantener una rutina estricta de cepillado y uso de hilo dental diario, sin excusas.
- Usar enjuague bucal y cuidar la salud de las encías para predicar con el ejemplo.
- Revisar periódicamente mi propia dentadura con un colega para mantenerla impecable. En verdad, háganlo.
2. Desarrollo profesional
- Asistir a al menos 3 congresos o cursos de actualización este año.
- Aprender una nueva técnica o especialidad dental (p. ej., ortodoncia invisible, endodoncia avanzada).
- Publicar un artículo o caso clínico en una revista odontológica (con gusto te orientamos para hacerlo en Odontología Actual).
3. Atención al paciente
- Mejorar la comunicación con los pacientes para que comprendan mejor su tratamiento.
- Reducir la ansiedad de los pacientes: hablarles suave y pausadamente y no ser alarmistas jamás; comentarles lo importante que será el tratamiento para el mejoramiento de su salud bucal.
- Mantener expedientes digitales completos y actualizados.
4. Organización y eficiencia en la clínica
- Optimizar la agenda para reducir tiempos de espera de pacientes. Básico para lograr confianza y aumentar aún más la credibilidad y con ello, la lealtad del paciente.
- Implementar protocolos más sostenibles (menor uso de plásticos, manejo adecuado de desechos).
- Revisar y mantener el equipo dental periódicamente para evitar fallas o accidentes.
5. Bienestar personal y balance
- Dedicar tiempo a hobbies y descanso para evitar el síndrome de burnout odontológico.
- Mejorar la postura y ergonomía durante los tratamientos para prevenir dolores crónicos.
- Aprender sobre manejo de estrés y mindfulness, útil tanto personal como profesionalmente.
- Cuidar la alimentación.
- Hacer ejercicio en la medida de lo posible.
6. Educación y divulgación
- Crear contenido educativo (videos, redes sociales o charlas) para promover la salud bucal en la comunidad.
- Organizar campañas de prevención dental en escuelas o comunidades locales.
- Asesoramiento a estudiantes de odontología o colegas jóvenes.
- Participación, de ser posible, con instituciones gubernamentales de fomento a la prevención y cuidado oral.
Lo anterior se trató de un listado general para que puedan ordenar ideas e irlas desarrollando poco a poco. Sin embargo, las necesidades de cada uno los guiarán para enfocarse más en algún punto.
Recuerden que la tendencia en este 2026 es una visión centrada en la prevención, el paciente en sí mismo, el uso biomateriales diseñados para interactuar con tejidos vivos de manera segura y funcional, intervenciones mínimamente invasivas, una odontología preocupada también por el entorno ecológico, y, por supuesto, una práctica clínica humanista.
¡Bienvenido, 2026!

