Por: Jacqueline Menchaca/blog/Newsletter
Desde el 14 de diciembre de 1990, la Asamblea General de las Naciones Unidas decretó el 1º de octubre como el Día Internacional del Adulto Mayor.
Afortunadamente, y cada vez más, se tira por la borda la creencia que las personas mayores de 65 años iniciaban su “cuesta abajo” en todos los aspectos: que ya no podían valerse por sí mismas, que no podían divertirse ni aprender nuevas tecnologías, o avanzar en un trabajo, etc., y, peor aún, que la enfermedad era parte de la edad.
Afortunadamente estos conceptos han cambiado. Ahora, hay más interés de las instituciones, las familias y el entorno por vincular a las personas de mayor edad en actividades y que se mantengan física y emocionalmente en mejores condiciones en épocas anteriores.
Constantemente se realizan programas destinados a su bienestar y esparcimiento. Hay atención especial para ellos en distintas áreas de la medicina, jornadas, pláticas, etc. Asimismo, las personas mayores, poco a poco, son incluidas en ámbitos laborales antes destinados a jóvenes. El mito de la vejez se desmorona a pasos agigantados.
¿Qué hacer para mejorar la condición de vida de los adultos mayores?
Si bien como familiar de alguien mayor se pueden llevar a cabo acciones como integrarlo siempre en el seno familiar, procurar e insistir en una alimentación adecuada, darle un trato inclusivo y digno, etc.; a nivel estomatológico, es de suma importancia que su dentista:
- Lo motive a realizar una correcta higiene oral; auotcuidado. Explicarle que las enfermedades dentales no son cuestión de edad, a pesar de los cambios fisiológicos que puedan suceder como parte natural de envejecimiento.
- Promueva el conocimiento de las patologías más comunes entre los adultos mayores, para que se trabaje en reducirlas o prevenirlas. Tal es el caso de las periodontopatías, que en muchas ocasiones conducen al edentulismo.
- Reduzca, con tratamientos específicos, la caries dental. Según datos del Sistema de Vigilancia Epidemiológica de Patologías Bucales, en México el 98 % de los adultos mayores presentan caries dental. 1
- Haga citas de control constantes con el fin de conocer los avances de algún tratamiento o prevenir la aparición de algunas enfermedades, o controlarlas. La xerostomía, por ejemplo, es un padecimiento que se da comúnmente en este tipo de población, en ocasiones por medicamentos que ingieren; otras, por alguna patología.2
- De la mano del geriatra y/o nutriólogo cuide su alimentación. Explicarle cómo los alimentos repercuten en el estado de la boca. Dejarle claro que el azúcar, el exceso de carbohidratos, el alcohol, etc., dañan los dientes y sus tejidos, y si además su higiene es pobre, repercutirá negativamente en toda su salud.
- Enfatice la importancia de un excelente estado oral frente a la existencia de enfermedades crónicas, explicándole su interrelación.
Hace tiempo, platicábamos con la doctora Teresa Álvarez Cisneros, internista con doctorado en Gerontología por el King’s College, y nos dijo que, si bien el proceso de envejecimiento es inevitable, los años y la forma en que se vivan varían según la disposición genética, pero ese aspecto es apenas el 20 %. El resto, sí, lo leen bien, es ambiente. Según nos comentó, el 80 % del estado físico y emocional en qué se envejece es estilo de vida y entorno.
Y aunque ella también sugirió que, para establecer buenos hábitos de alimentación, de ejercicio, de sanidad mental, etc., debería iniciarse con programas desde la infancia que los promuevan, el papel del odontólogo y en específico del odontogeriatra es fundamental, dado que forma parte de ese ambiente que tiene el adulto mayor, y por ser quien lo puede guiar hacia una mejor salud dental y optimizar su calidad de vida.
¡Felicidades, adultos mayores!
Fuentes:
1https://www.gob.mx/inapam/articulos/salud-bucodental-en-las-personas-mayores
2https://estudidentalbarcelona.com/que-es-la-odontogeriatria-y-cual-es-su-importancia/