Por: Jacqueline Menchaca/blog/ Newsletter
Es maravilloso asistir a consultorios dentales de odontopediatras y ver tantas cosas que ellos adecuan para hacer la visita de los niños más agradable.
Desde su uniforme y cubrebocas con figuras infantiles, hasta mobiliario con formas de animales o de personajes infantiles conocidos; paredes con colores vivos en la recepción, mesitas y sillas pequeñas para que coloreen mientras entran a consulta, etc.
El lenguaje llama mucho la atención dado que es siempre adecuado a la edad del paciente pediátrico que atienden, explicándoles de manera muy sencilla lo que van a realizarles en la boca, así como aclarándoles las dudas que tengan si ya tienen inquietudes.
Cuando son aún muy pequeños, como de 2 a 5 o 6 años, la forma en que se les fomenta la higiene oral puede ser a través de juego, tal vez de algún video infantil. Y, algo que no debe dejarse fuera es la lectura.
Tener un libro siempre es beneficioso, ya que lo puede leer tanto el niño mismo, como cualquier familiar para que aprenda de manera divertida a cuidarse la boca.
Navegando por la red encontramos un documento realizado por la Secretaría de Salud del Gobierno CDMX, en 2013 como primera edición y con la participación de CENAPRECE, ADM, COLGATE y la Dirección General de Promoción de la Salud.
Con ilustraciones muy coloridas y simpáticas (Benito y su mamá) y un lenguaje de fácil comprensión, las autoras y colaboradores orientan al niño a realizar una perfecta limpieza dental utilizando pasta y cepillo dentales, un vaso y agua, indicándole claramente: la cantidad de pasta que debe poner, que no debe tragarse el agua, los movimientos a realizar en cada parte de la boca durante el cepillado, etc.
Asimismo, a través de la mamá osa, Benito aprende incluso a utilizar el hilo dental a partir de los 6 años y qué alimentos debe comer y cuáles evitar para cuidar su boca. Así, al ir con la Dra. Gato, ella descubrirá que Benito tiene sus dientes sanos.
El pequeño libro cuenta con todos los elementos tanto para ser recomendado por el odontopediatra como para, incluso, retomar la forma en que los personajes (mamá osa y Benito) interactúan y planteárselo al paciente al que se le quiera motivar y enseñar a lavarse sus dientes.
Ya se han realizado muchos videos basados en este divertido documento, así que también se cuenta con esa opción.
Si bien existen muchos materiales como este, lo importante es destacar que se trata de herramientas excelentes, aliadas del odontopediatra y de la familia del niño, para educarlo sobre la trascendencia de contar con una boca libre de gérmenes y placa dental, de una forma divertida y didáctica.
Fuente: https://www.gob.mx/cms/uploads/attachment/file/55898/cuentoositobenito.pdf