Por: Jacqueline Menchaca/blog/newsletter
Odontología Actual tuvo la oportunidad de conversar con el Dr. Sergio Curiel Torres, recién presidente electo de la ADM (Asociación Dental Mexicana), período 2024-2025.
Cuenta con una trayectoria intachable desde que egresó de la Escuela de Odontología de la Universidad del Bajío, en 1991; posgrado en Endodoncia en la misma universidad; maestro de pregrado y posgrado de Endodoncia; docente del posgrado de Odontopediatría, ambas en la nombrada universidad; conferencista nacional e internacional; y miembro de diferentes asociaciones dentales también nacionales y extranjeras.
Desde 1992 a la fecha, ha pertenecido a la ADM en varias posiciones de los comités, por ejemplo, presidente de la Comisión de Educación Continua, además de secretario suplente de la misma y miembro del cuerpo de profesores de esta gran Asociación Dental.
Acompáñanos a conocer los planes del nuevo presidente y lo que espera dejar como legado al terminar su período.
¿Cómo se siente de ser el nuevo presidente de la Asociación Dental Mexicana?
Ya en esta nueva etapa del Comité ejecutivo, 2024-2025, que el día de hoy se asume el cambio de estafeta, estoy con mucha actitud, muy positivo, pensando siempre en el gremio odontológico, en la comunidad y, sobre todo, en el beneficio que pueden tener nuestros pacientes. Dar mucho de servicio social, vamos a interactuar con obras benéficas para los desprotegidos como lo son personas discapacitadas, sobre todo niños, a quienes no los están volteando a ver.
Ahí existe una necesidad muy grande, pero podemos aportar mucho a través de alianzas con instituciones que ya tienen una guía de trabajo o un proyecto ya establecido.
¿Cómo van a apoyar ustedes?
Estoy originando proyectos, prácticamente con empresas que nos pueden apoyar, como aquellas que fabrican cepillos dentales, pastas, etc. Hay que impulsar este tipo de actividades, y obviamente, la prevención para la niñez en lo referente a la caries.
¿Cuál es la posición de la ADM frente a la situación actual de la prevención en nuestro país?
ADM ya está trabajando desde hace mucho tiempo, a partir de la Fundación ADM, en el Programa de Salud Bucal, que ha tenido muchos beneficios y que ha sido ejemplo para otras asociaciones e incluso otros países. En ese rubro estamos ya adelantados. Hay un sistema ya establecido que va a ayudar muchísimo a seguir creciendo. Los colegios del interior de la República nos siguen ayudando en ese proyecto.
Nuestra postura es llegar a lograr un futuro sin caries.
¿Cuál es su opinión de la participación de la ADM en la educación continua de los odontólogos?
Lo estamos viendo en este XL Congreso Internacional de la ADM, 2023, con la industria dental AMIC, con 66 conferencistas que realmente han dejado señales y enseñanzas a la juventud, que es la que seguirá en este camino de la Odontología, la prevención, el tratamiento con nuevos materiales y la educación continua tiene que ser el Eje de la ADM.
¿Y cuál es para usted la situación de la educación continua en general en nuestro país?
La educación continua la podemos dividir en lo que era la etapa presencial, luego nos fuimos a la etapa virtual, posteriormente quedó la híbrida; y ahora es nuevamente presencial. Lo estamos viendo en el congreso, aquí, en la Ciudad de México, con mucho éxito, y un registro de 10 000 personas o más, en el área de conferencias.
A los jóvenes hay que llegarles de otra forma. La educación continua la seguimos trabajando a través de la Asociación, con conferencistas que tenemos ya propios, en todas las áreas de odontología.
Asimismo, la ADM certifica. Pedimos 40 puntos anuales. Para lograrlo, el profesional tiene que acudir a cursos. Entonces es una buena herramienta para que lo hagan. Ahora, hay que trabajar más para que la gente se convenza de que debe estar certificada. Y que la población sepa que puede ir con un dentista certificado, actualizado.
¿Qué espera usted dejar como presidente, a la ADM?
Como persona, sembrar la cultura de la humildad. De ver siempre el origen y cómo nos hemos ido formando, y con una visión futurista hacia las nuevas innovaciones tecnológicas y educativas. Pero sobre todo sembrar entre los jóvenes que nunca pierdan su esencia ni su rumbo; todo, con rectitud y mucha ética profesional.