Por: Jacqueline Menchaca/blog/newsletter
¡Bienvenido, marzo! Mes que recibe a la primavera, con su calor y sol; y a dos eventos odontológicos dignos de celebrar cada año: el Día Mundial de la Salud Bucal y el Día del Protesista.
20 de marzo, Día Mundial de la Salud Bucal:
Desde hace diez años, en 2013, la organización internacional World Dental Federation instauró este día como aquel en el que se celebraría este evento que para el mundo representa tanto.
Poco a poco la atención bucal escala peldaños en ser el foco de atención urgentemente requerido, dado que las enfermedades dentales afectan a millones de personas a nivel global y repercuten gravemente no solo en la salud de las personas sino a nivel económico.
Sin prisa, pero sin pausa, así se desarrollan programas destinados a conseguir una concientización en todas partes y en todos los niveles sobre la importancia de una buena salud oral, a través de la prevención, como lo es la higiene, así como la atención odontológica a tiempo.
Si bien existen rezagos en algunas comunidades marginadas de todos los países, la World Dental Federation no cesa en la elaboración de estrategias que ayuden a solucionar esta falta de atención dental a las poblaciones más vulnerables, como los niños, por ejemplo, de escasos niveles económicos.
Es, precisamente al celebrar el 20 de marzo el Día Mundial de la Salud Bucal que se invita a los organismos gubernamentales, privados, medios de comunicación, instituciones educativas, asociaciones dentales, etc., a tomar este día para promover sus campañas en todos los ámbitos posibles.
24 de marzo, Día del Protesista Dental:
En este día se celebra al artesano de sonrisas, al fabricante de belleza y salud.
El protesista dental es la mano derecha del odontólogo, del ortodoncista y de aquel especialista que requiera aditamentos especiales para restablecer la función y estética de una boca.
Es el artista que diseña y confecciona los aparatos protésicos, bajo directrices del odontólogo, desde un laboratorio.
Es quien personaliza cada trabajo, según las necesidades del paciente, con destrezas en el manejo de materiales como acrílico, titanio, ceras, plástico, yesos, porcelanas.
El perfil del protesista dental incluye su capacidad de liderazgo y disposición al trabajo en equipo. Asimismo, necesita destrezas manuales, habilidad para confeccionar y diseñar aparatos o piezas pequeñas, adaptarlas.
Requiere ser cuidadoso y meticuloso, para que los resultados de su trabajo se proyecten en excelentes aparatos de corrección dental como los de ortodoncia, interceptivos y ortopédicos, férulas oclusales, restauraciones dentales indirectas, o en prótesis estéticas y funcionales capaces de realizar correctamente funciones como la masticación, deglución, etc.
En universidades como la UNAM el término de esta carrera técnica profesional es Laboratorista Dental, y cuenta con un plan de estudios de 3 años que incluye el uso de tecnología de vanguardia, ya existente en facultades odontológicas de muchas otras instituciones. Todo con el fin de ofrecer lo mejor al paciente.
La salud, la belleza y la funcionalidad bucal, tan importante en múltiples procesos biológicos del cuerpo humano, agradecen la existencia de este tipo de especialidades, mismas que de la mano del odontólogo, resuelven para bien la vida de tantas personas. ¡Felicidades!
Fuentes:
fdiworldental.org/es-dia-mundial-de-la-salud-bucodental
mextudia.com
fodonto.uncuyo.ar